Las Public relations (PR) son la vía más efectiva para introducir un mensaje en los medios, ya optemos por dirigirnos a una audiencia concreta o nos enfoquemos en una estrategia de comunicación B2B. Pero las relaciones públicas son una parte del todo, vivimos en un mundo cada vez más visual donde las marcas también apuestan por estrategias de branding dirigidas a influir en las emociones y psicología de los consumidores.
El color corporativo es uno de los principales factores que tienen en cuenta los profesionales de marketing para conseguir que la marca sea percibida conforme a los valores que busca trasmitir. El color es un vehículo para generar una primera impresión adecuada, una forma trasmitir una idea y, por supuesto, también de comunicar.
Beneficios de tener un color corporativo en comunicación
La realidad es que una identidad corporativa fuerte, basada en un color, fácil de asociar de un solo vistazo, consigue hacer mucho más fluida la estrategia de comunicación. La clave es el efecto simbiosis, un periodista está expuesto a un sinfín de interacciones diarias con marcas nuevas, a miles de logos y un color puede ayudarle a recordar o identificar de forma intuitiva la nuestra.
No solo eso, los colores trasmiten mucho más de lo que pensamos y va a empezar a hablar de la marca desde el primer momento, conseguir alinear los valores expresados en la nota de prensa con la imagen que se trasmite es el elemento diferencial para conseguir la estrategia de comunicación exitosa que siempre perseguimos.