La pirámide invertida de las relaciones públicas


piramide_invertidaTodo aquel que haya estudiado periodismo recordará uno de los temas que más se repetían en los años de la facultad: la pirámide invertida. Para quien no lo sepa, se trata de un método para estructurar la información de más importante a menos y que, aunque no es exclusivo, tiene en la prensa su mayor exponente clásico.

Hasta aquí lo que todo periodista o persona afín a los medios de comunicación sabe y ha utilizado alguna vez para redactar sus noticias. Lo que nadie nunca nos contó es que cuando pasas a trabajar en el otro lado, en el conocido como lado oscuro, adaptarás ese modelo a tu propia conveniencia o, mejor dicho, a la de tus clientes a la hora de escribir tus notas de prensa.

Si en el modo tradicional el titular debe ser descriptivo, resumiendo lo más importante, ahora buscarás que sea lo más favorable a tu cliente pero, a la vez, que atraiga al periodista, lo que en ocasiones parecerá una misión sólo apta para Ethan Hunt. Como periodista sabes que poner el nombre de la empresa en el titular está mal pero ahora el clipping manda y cuanto más arriba aparezca tu cliente, mejor. Si no puedes ponerlo allí, nunca más abajo de la entradilla o el primer párrafo pero siempre sin abusar y repetir el nombre en cada párrafo, que quieres que el redactor te publique.

También sabes que el periodista no cuenta con todo el espacio que a ti te gustaría así que, una vez más, echas mano de la famosa pirámide y priorizas el contenido. Con este fin, llega el siguiente tópico periodístico que adoptas para tu nota de prensa: las 5 Ws. El qué, cuándo, dónde, quién y por qué ya no se refieren al suceso o hecho noticioso; ahora se trata de qué quiere decir el cliente, dónde es más probable que puedan publicarlo, quién es el redactor al que le pueda interesar esto, cuándo veré mi nota publicada.

Ya no te preguntas la razón (ya la sabes, es tu trabajo), ahora sólo te interesa el cómo conjugar esos factores para conseguir un texto que expresa los intereses de tu cliente pero que también sirva al periodista, no sólo porque así será más fácil que te publiquen sino porque has sido uno de ellos y sabes lo que son las notas tostón.

Otra enseñanza de la facultad que pones en práctica es la agenda setting o lo que es lo mismo de qué hablan los medios. Y ahí buscas a tu experto o portavoz para que te ilustre en el tema y para adornar tu nota con sus declaraciones y así poder “colocar” tu nota sobre el tema.

En definitiva, cuando escribes desde el lado contrario dejas de ser un intermediario entre la realidad y el lector para pasar a ser un mediador entre cliente y periodista y usas todas las herramientas que has aprendido y utilizado durante tu vida laboral para contar la información del primero de modo que facilites la labor lo más posible al segundo.