Seguidores, likes, engagement y otras cosas del querer (de las redes sociales)

La vida social ya no es tener amigos y salir de cañas, sino ver cuántos likes consigues en una foto de tus redes sociales. Los cambios no siempre son evoluciónLeer Más

Seguidores, likes, engagement y otras cosas del querer (de las redes sociales)

La vida social ya no es tener amigos y salir de cañas, sino ver cuántos likes consigues en una foto de tus redes sociales. Los cambios no siempre son evolución positiva, pero desde luego hay que entenderlos y, en relaciones públicas, aprender de ellos, observarlos e incorporarlos a estrategias y campañas.

Todos queremos gustar y los clientes no son una excepción. En redes sociales hemos visto cómo la preocupación del “número” se cambiaba por la de la “participación”. Tener miles de fans iba perdiendo importancia frente a tenerlos de calidad, y eso se traducía en activos: daban a like, comentaban, compartían… De unos cambios de algoritmos a esta parte hemos visto cómo esas cifras disminuyen y la pregunta se pone sobre la mesa con preocupación, asombro y desconfianza. ¿Por qué mis fans ya no participan? ¿Qué pasa en mis redes que no consigo gustar? Los usuarios también se hacen “mayores” dentro de las redes sociales y cada vez gestionan más marcas, siguen a más perfiles. Pero, sobre todo, han hecho de las redes una fuente de información y no de interacción.

Ese paso ha dado lugar a que consumamos redes como hacíamos antes con los medios. Es decir, que lo leemos, lo registramos (o marcamos la página) y cuando encaja en nuestra vida -tenemos una necesidad de compra, nos pregunta un amigo- recuperamos esa información. Así que la respuesta es sí, tus fans siguen viendo tu información, siguen teniendo interés por ti, pero ya eres parte de su mapa de información. Tener fans fieles y a largo plazo es como el amor… Después de media vida juntos ya no te digo a diario que te quiero, pero no dudes que lo pienso.

¿Cómo brillar en las entrevistas con periodistas?

Las entrevistas no son tarea sencilla para los portavoces. Los nervios, querer transmitir una imagen concreta, tener información que no puedes comunicar… son factores que complican el encuentro cara aLeer Más

¿Cómo brillar en las entrevistas con periodistas?

Las entrevistas no son tarea sencilla para los portavoces. Los nervios, querer transmitir una imagen concreta, tener información que no puedes comunicar… son factores que complican el encuentro cara a cara con los periodistas. ¿Cómo ser un buen portavoz? ¿Cómo dar buenos titulares en una entrevista con un periodista?

En realidad, puedes ser un gran portavoz en muchas áreas de tu vida, pero no serlo en las entrevistas. No saber concentrar mensajes, querer impresionar al interlocutor o que el micrófono te imponga es muy común y puede jugarte una mala pasada a la hora de atender a un periodista para hacer la entrevista.

Nadie nace sabiendo y afortunadamente existen técnicas que ayudan a mejorar y afrontar estos encuentros con naturalidad, con el objetivo de terminar siendo una fuente de gran utilidad para el periodista al facilitarle buenos titulares e información.

Lo primero que deberías hacer es un curso de “Formación de portavoces”. En eVerythink PR Boutique en primer lugar evaluamos tanto el nivel de portavocía de la persona en cuestión, así como los mensajes de la empresa, para ayudaros a generar interés y titulares mediáticos, además de ofrecer herramientas que te ayuden a expresarte con naturalidad y de forma clara.

Aquí te contamos algunos consejos básicos que puedes empezar a practicar:

  1. Prepárate la entrevista. Piensa bien qué quieres decir y concentra en 4-5 titulares los mensajes que deberás ir dando y repitiendo a lo largo de la entrevista para que quede claro.
  2. Saluda al periodista con educación, hazle sentirse cómodo y que te vea dispuesto a hablar.
  3. A ti te interesa hacer la entrevista y al medio le interesan tus declaraciones. Pero si no cuentas nada interesante, no se publicará. Hay que ser generoso 😉
  4. No mientas, sé claro, honesto y cuando haya información que no puedas compartir prepara cómo “esquivarlas” con discreción
  5. Si no sabes contestar a alguna pregunta concreta, ofrécete a enviarle luego por email la información
  6. Disfruta de la entrevista. Tienes un tiempo de oro para mostrar tu mejor versión y que los medios hablen sobre ti, así que ¡aprovéchalo!